
Ayer asistí a uno de los más multitudinarios y emocionantes de la historia: Celestino Corbacho (Alcalde de Hospitalet de Llobregat y Presidente de la Diputación de Barcelona), José Montilla (President de la Generalitat Catalana), Felipe González (ex presidente del Gobierno y actual Presidente del Grupo de Reflexión sobre el futuro de Europa o del también llamado Comité de Sabios), Carme Chacón (Ministra de Vivienda y candidata a las elecciones Generales por Barcelona) y José Luis Rodríguez Zapatero (Presidente del Gobierno).
Una cartelera de lujo.
Y sí, creo que al menos la gran mayoría de los que asistimos, ya estábamos convencidos, íbamos con la ilusión de ver a nuestros representantes y líderes políticos, con ganas de compartir con nuestros compañeros la esperanza de una próxima victoria, y en el fondo, para crecernos. Sí, porque yo creo que lo mejor de un acto así es conseguir convencerte aun más, regenerar la energía que nos hace falta para encarar una campaña electoral que se prevee dura, e inyectarnos en las venas, el sentimiento socialista, en su más pura definición.
Lo disfruté mucho, con los míos y con las miles de personas que no conocía apenas (más de 10.000) pero que cuando les miraba, uno a uno, pensaba: "son como yo", al menos en esto, "son como yo". Y me encanta.
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