
Hoy, sólo quedan dos. Y no por falta de ganas de demostrarse a sí mismo lo que valen, ni por miedo a la derrota, ni por ninguna otra vana razón, sino porque están lesionados. Paco ha sufrido de nuevo problemas en su rodilla, y su especialista le ha recomendado un reposo casi vitalicio y ningún sobreesfuerzo. Sigue recuperándose amargamente. María ha sufrido una tendinitis. Su traumatólogo sigue haciéndole pruebas y ella tomando su tratamiento. No será más que un tiempo de reposo y pronto estará corriendo de nuevo.
Me hace ilusión ver a los casi 7.000 corredores profesionales y amateurs, aunque todos ilusionados, salir del quilómetro cero restándoles más de 21.
María, y como a falta de pan, buenas son tortas, se ocupará de las urgencias médicas en la llegada, ella y su espíritu colaborador.
Os esperaré en la meta...
3 comentarios:
Y esperemos llegar a la meta!!!
La verdad es que me sabe mal por María y Paco, es una lástima, pero no hay que perder la esperanza ni el humor. Si no se puede no se puede.
El compromiso de llegar está, llevamos mucho tiempo esperando este día y sólo espero que no sea ni en moto ni en ambulancia, que esos ya nos lo conocemos y no es nada glamuroso!!!
Ah! un masajito bien hecho por María en la llegada no me lo quiero perder, jejeje
Bueno espero que nos representen como es debido, que seguro lo harán.
Seguro que la próxima estamos María y yo, seria mucha casualidad volver a tener problemas la misma fecha,
Ya nos volveremos a juntar la plantilla al completo que mitjas hay muchas.
Ahhh yo tb estaré en la meta para darles ánimos.
Eso, eso, que necesito ayuda para aguantar las mochilas de los corredores! Qué luego siempre voy cargada como una burra...
Allí estaremos gritando, aunque a algunos les es indiferente... entran tan concentrados en la meta que ni se enteran que su público les aclama.
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